miércoles, 29 de febrero de 2012

Primer baño, o acto de rebeldía contra la veterinaria

El título se debe a que realmente fue, digamos, un acto rebelde contra la veterinaria, Priscila. Ella dijo que no la bañáramos antes de que terminara su ciclo de vacunas (podía enfermarse de algo), pero...

Pasos para bañar a tu cachorro/a:
1-Sentirle mal olor, y que no se le quite ni con perfumes tipo Carolina Herrera o Yves Saint Laurent, en versión canina.
2-Comprar el shampoo adecuado, es decir, sin colores sicodélicos ni fragancias embriagadoras. Yo le compré a Maia uno marca Holly vet, transparente, sin olor, especial para cachorros.
3-Preparar el baño-bunker para la acción (aleja las toallas de humanos, la alfombra, etc., para evitar mojadas por sacudidas repentinas).
4-Por supuesto, dejar el shampoo a mano. Es muy importante. La sacudida de tu pequeñín puede dejarte ciego. Bueno, más o menos.
5-Llenar la tina (bañera, como dicen por otras latitudes) hasta la mitad de la altura de tu cachorro. Con agua tibia, por supuesto, no con agua fría.
6-Si tienes ducha teléfono, tenla a mano. Si no, llena un jarro con agua caliente para el enjuague (así se irá enfriando, pero no tanto).
7-Toma a tu cachorrín, procurando no alarmarlo con palabras terroríficas para él.
8-Deposita a tu peludito/a en la tina, suavemente. Si quieres, puedes dejarle algunos juguetes que le gusten.
9-Mójalo. (¡La cabeza no! Por el momento es mejor que no. Y si tienes un orejón como un Cocker spaniel, procura que no le entre agua en los oídos.)
10-Aplícale shampoo las veces que sea necesario.
11-Enjuágalo.
12-Sécalo. Es ideal hacerlo con secador, pero si no puedes, llévalo a una zona de agradable temperatura (al sol o cerca de una estufa) y sécalo con una toalla.
13-Aplícale colonia de perros, si es que tienes. Si no, sencillamente disfruta de su nuevo olor a limpio.

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